LAS ACTITUDES DE UN INTERCESOR

 

Aquí te irás nutriendo de como debe ser un intercesor y como actuar dentro de un grupo o ministerio.

 

Estudia cada uno de los temas con paciencia, dedicación y pidiendo al Señor que te de la sabiduria para entender y sobre todo aplicarlas cuando estés intercediendo por los demás.

 

Has un click cada uno de los puntos que indica las Etiquetas

 

 

Etiquetas

 

 

Intercesión para orar por la conversión de una persona, un grupo, una institución o una nación

En mi experiencia personal, orar intercesión por la conversión de una persona, un grupo, una institución o una nación, es uno de los actos de culto y amistad, que más alegran a Dios.


Pienso que esto es así, ya que que Dios, como Creador, quiere que seamos felices. Para eso nos creó. Sólo cuando disfrutemos de ser sus hijos, y lo recozcamos como Padre alcanzaremos esa felicidad. Esta se completará absolutamente cuando descubramos que los seres que nos rodean son nuestros hermanos, empezando por las personas y siguiendo por los otros seres vivos. La conversión será entonces otra manera de vivir y ver las cosas, centrada sobre todo en el amor y la justicia.
Esto demuestra, porque, para el que intercede, este punto es central, porque para Dios lo es, y la intercesión eficaz es la que descubre cual es la voluntad de Dios, y esa es la garantía de que otorgue su gracia. El acto dramático de la vida, lo dá el hecho de que cada ser humano, grupo o nación es libre y puede rechazar la gracia de la conversión. Esto puede hacer pensar al intercesor que Dios no escucha su petición; pero lo que sucede es el drama de la libertad. No hay que confundirse ni desanimarse. El intercesor, como amigo del Espíritu Santo, por connaturalidad con Él, se dá cuenta, percibe con su inteligencia emocional, si la persona, el grupo, la institución o la nación, en los distintos actos de su vida, es necia y puede ir rechazando distintas gracias, o si es humilde y abierta para recibir la ayuda del Señor. El primer discernimiento que hay que realizar para interceder en estos casos, es la actitud de docilidad o no que tenga la persona, el grupo, la institución o la nación. Si es dócil y uno lo observa, se puede orar y ofrecer actos de la vida, por la conversión en general. Y si uno es observador y lleva el recuerdo en su corazón y además lo anota en un registro de oración ( yo hago así) observará que al tiempo, un año o dos, Dios le mostrará algunos de los frutos que han dado la persona, el grupo, la institución o la nación.

Nicodemo encontrándose con Jesús.

Comparto una experiencia, para que se comprenda. Esta experiencia demoró más tiempo en concederse la gracia,ya que quedó esperando en el tiempo, la actitud dócil de la persona. Yo estaba ayudando a una alumna de catequesis escolar, en distintos aspectos de su vida, y Dios había realizado signos y prodigios en su vida y la de su madre, a través de la oración de intercesión que habíamos hecho. Algunas de estas experiencias las contaré en otras entradas. Resulta que aquí ella decide juntarse con un chico a convivir y no casarse como alianza con Dios. En este caso, por su historia, era claro que era un involución en su proceso de maduración y que si hacía esto, no iba a ser dócil, para recibir otras gracias. Con esta percepción que me regalaba el Espíritu, hice la intercesión final pidiendo que completara su maduración y en el momento que se pudiera, se casaran celebrando la alianza con Dios. Pasaron quince años, y en un lugar donde nos reuníamos grupos de oración, se me acerca una persona y yo la reconocí. Allí Dios me hizo dos regalos simultáneos. Esta persona, muy comprometida en la oración por la sanidad física de otros, se había desviado y alejado de su comunidad y de su servicio. Cuando yo lo supe intercedí a Dios por su protección y para que volviera al redil. Yo sabía por experiencia que los que oran por sanidad física, suelen ser desparramados por la acción del maligno, si no se cuidan y perseveran en la caridad. Ella estaba volviendo, y casi sin mediar otras palabras, me comenta de una amiga suya, y me transmite que se va a casar en una iglesia, en la capilla, en donde yo la había conocido 20 años antes, y me lo hacía saber a mí, sin que hubiéramos hablado del tema. Dios me hizo conocer algo 15 años después que lo había pedido. Es anecdótico hablar de los límites del intercesor, ya que soy algo despistado y me confundí de día. Cuando fuí a saluarla, el casamiento casi en secreto, pero no para mí, ya había tenido lugar.
Aquí les dejo un video para que lo disfruten con una canción religiosa que habla de nacer de nuevo. La pueden escuchar aplicándola a su propia vida pidiendo a Dios que los haga nacer de nuevo. También la pueden escuchar y ofrecer esta canción por personas por las cuales quieran interceder por esto. Esta es otra forma de interceder, a través de una canción, uniéndose a la acción de Jesús y de su Espíritu que actúan por medio de la música y la fe.

Julio Daniel Nardini





Compartir en Facebook con mis amigos
Compartir      
HAGA CLICK EN Compartir y envia por face book a quien tu desees.