LA LECTIO DIVINA -PRACTICA

Domingo 28º Tiempo Ordinario Ciclo B

Octubre 14 de 2012

Mi amor se mantendrá eternamente, mi fidelidad está afianzada en el cielo

Salmo 89, 03

PREPARACIÓN ESPIRITUAL

“Hagamos ahora silencio para escuchar con eficacia la Palabra del Señor y mantengamos el silencio luego de la escucha porque seguirá habitando, viviendo en nosotros y hablándonos. Hagámosla resonar al principio de nuestro día, para que Dios tenga la primera palabra y dejémosla que resuene dentro de nosotros por la noche, para que la última palabra sea de Dios”.

(Mensaje Final del Sínodo de los Obispos sobre La Palabra de Dios, Roma, 2008)

TEXTO BÍBLICO: MARCOS 10, 17 - 30

¹⁷ Cuando se puso en camino, un hombre corrió hacia él y, arrodillándose, le preguntó:

— Maestro bueno, ¿qué debo hacer para heredar la Vida eterna?

¹⁸ Jesús le dijo:

— ¿Por qué me llamas bueno? Sólo Dios es bueno. ¹⁹ Tú conoces los mandamientos: No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, no perjudicarás a nadie, honra a tu padre y a tu madre.

²⁰ El hombre le respondió:

— Maestro, todo eso lo he cumplido desde mi juventud.

²¹ Jesús lo miró con amor y le dijo:

— Sólo te falta una cosa: ve, vende lo que tienes y dalo a los pobres; así tendrás un tesoro en el cielo. Después, ven y sígueme".

²² El, al oír estas palabras, se entristeció y se fue apenado, porque poseía muchos bienes.

²³ Entonces Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos:

— ¡Qué difícil será para los ricos entrar en el Reino de Dios!

²⁴ Los discípulos se sorprendieron por estas palabras, pero Jesús continuó diciendo: "Hijos míos, ¡Qué difícil es entrar en el Reino de Dios!

²⁵ Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el Reino de Dios".

²⁶ Los discípulos se asombraron aún más y se preguntaban unos a otros:

— Entonces, ¿quién podrá salvarse?

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²⁷ Jesús, fijando en ellos su mirada, les dijo:

— Para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque para él todo es posible.

²⁸ Pedro le dijo:

— Tú sabes que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido.

²⁹ Jesús respondió:

— Les aseguro que el que haya dejado casa, hermanos y hermanas, madre y padre, hijos o campos por mí y por la Buena Noticia, ³⁰ desde ahora, en este mundo, recibirá el ciento por uno en casas, hermanos y hermanas, madres, hijos y, campos, en medio de las persecuciones; y en el mundo futuro recibirá la Vida eterna.

1. LECTURA

¿Qué dice el texto?

ü Algunas preguntas para ayudarte en la lectura atenta…

Según Jesús ¿Qué se requiere para la vida eterna? ¿Por qué es tan difícil alcanzar el Reino de Dios? ¿Cuáles son las recompensas para quienes buscan el Reino? ¿Dónde las conseguirán?

ü Algunas consideraciones para una lectura provechosa…

Teniendo en cuenta los cambios de lugar y personas con las que interactúa el Maestro

Una persona de quien no conocemos su identidad, se acerca a Jesús con una frase poco típica “Maestro bueno”. El adjetivo “bueno” se solía usar solamente para hablar de Dios (Sal 118, 1) por lo cual Jesús aunque es el Hijo de Dios, toma la actitud humilde y pide que no le digan así ya que el único bueno es el Padre.

Aunque el cumplimiento de los mandamientos es vital para la relación con Dios, Jesús en este relato hace una aclaración al respecto, no basta cumplir los mandamientos si existen cosas que aun me alejan de una relación cercana, fiel, con el Padre.

Esta pequeña frase es la que nos ayuda a entender todo el discurso de Jesús respecto a las renuncias, “Solo Dios es Bueno”, de esta manera es por acercarse a la bondad de Dios que vale la pena hacer todo para estar junto a Él, para gozar de su presencia eterna: cumplir los mandamientos, dejar aquello que nos aleja del plan de Salvación, aquello que nos lleva a tener falsos dioses.“Claves de Lectio Divina para Jóvenes” Proyecto Lectionautas CELAM/CEBIPAL – SOCIEDADES BIBLICAS UNIDAS http://www.lectionautas.com – http://www.discipulitos.com

La petición de Jesús va en contra de lo que muchos pensaban en la época, la riqueza material era vista como reflejo de la bendición de Dios, y por lo tanto los pobres eran personas impuras y castigadas por Dios.

La búsqueda de esta persona respecto a la vida eterna, es usada por Jesús para enseñar acerca del Reino de Dios. La intensión de Jesús con la expresión de “¡Qué difícil será para los ricos entrar en el Reino de Dios!” (v. 24) no es decir que la riqueza es pecado o que para seguirlo hay que ser pobres materialmente. Lo que el Maestro realmente quiere mostrar es como los apegos al tener algunas cosas termina haciéndolas mas importantes que Dios mismo.

El asombro ante la respuesta de Jesús se termina de hacer evidente con la pregunta de los discípulos respecto a la dificultad de entrar al Reino de los Cielos. La confianza absoluta en Dios es la respuesta que termina por aclarar el camino para encontrar el Reino. Tener la certeza que para Dios no existe nada imposible, tener fe es lo que hace todo posible.

El seguimiento de Jesús y de la Buena Nueva tiene dos renuncias: al apego a los bienes representados en la casa o las tierras; apego a la familia: “hermanos o hermanas o madre o padre o hijos”. La recompensa: prosperidad hoy y la entrada al Reino de Dios.

2. MEDITACIÓN

¿Qué me dice el Señor a mí en el texto?

Comencemos esta meditación con unas palabras del Papa Benedicto XVI

En la narración evangélica, San Marcos subraya como «Jesús se le quedó mirando con cariño» (Mc 10,21). La mirada del Señor es el centro de este especialísimo encuentro y de toda la experiencia cristiana. De hecho lo más importante del cristianismo no es una moral, sino la experiencia de Jesucristo, que nos ama personalmente, seamos jóvenes o ancianos, pobres o ricos; que nos ama incluso cuando le volvemos la espalda.

Comentando esta escena, el Papa Juan Pablo II añadía, dirigiéndose a vosotros, jóvenes: «¡Deseo que experimentéis una mirada así! ¡Deseo que experimentéis la verdad de que Cristo os mira con amor!». Un amor, que se manifiesta en la Cruz de una manera tan plena y total, que san Pablo llegó a escribir con asombro: «me amó y se entregó a sí mismo por mí» (Ga 2,20). «La conciencia de que el Padre nos ha amado siempre en su Hijo, de que Cristo ama a cada uno y siempre, —sigue escribiendo el Papa Juan Pablo II—, se convierte en un sólido punto de apoyo para toda nuestra existencia humana», y nos hace superar todas las pruebas: el descubrimiento de nuestros pecados, el sufrimiento, la falta de confianza.“Claves de Lectio Divina para Jóvenes” Proyecto Lectionautas CELAM/CEBIPAL – SOCIEDADES BIBLICAS UNIDAS http://www.lectionautas.com – http://www.discipulitos.com

En ocasiones pensamos que vale la pena dejar un trabajo o una casa si tengo la posibilidad de conseguir algo mejor, Jesús hoy nos pide dejar los apegos, pero nos muestra algo mucho mejor: la santidad.

¿Qué cosas se me costaría dejar para seguir a Cristo? ¿Qué cosas si me pidiera Cristo que las dejara hoy me entristecería dejar? ¿Cuáles son las riquezas que impiden que los jóvenes de hoy digan si a Cristo?

3. ORACIÓN

¿Qué le respondo al Señor que me habla en el texto?

Oración de Confianza

Padre, me pongo en tus manos.

Haz de mí lo que quieras.

Sea lo que sea, te doy gracias.

Estoy dispuesto a todo, lo acepto todo, con tal que tu voluntad

se cumpla en mí y en todas tus criaturas.

No deseo más, Padre.

Te confío mi alma, te la doy con todo el amor de que soy capaz.

Porque te amo y necesito darme a Ti, ponerme en tus manos,

sin limitación, sin medida, con una confianza infinita, porque

Tú eres mi Padre.

Charles de Fuocauld

¿Qué deseas expresarle a Dios movido por el evangelio meditado?

4. CONTEMPLACIÓN

¿Cómo hago propias en mi vida las enseñanzas del texto?

¿A que me invitan los textos de hoy? ¿Confió realmente en el amor misericordioso de Dios que me indica que me aleja de Él? ¿Qué recompensas he recibido de Dios por recibirlo y seguirlo? ¿Creo que es mas lo que me pide el Señor que lo que me ofrece?

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5. ACCIÓN

¿A qué me comprometo para demostrar el cambio?

¿Qué compromisos me invita el Señor a tener hoy? ¿Qué exigencias me hace falta seguir para ser su discípulo misionero? ¿Qué proyecto de vida me muestra el Señor que debo seguir?

“Tú eres el Bien, todo Bien, sumo Bien, Señor Dios, vivo y verdadero”

San Francisco de Asís

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TEXTO BIBLICO: Marcos 10, 17-31

10,17: Cuando se puso en camino, llegó uno corriendo, se arrodilló ante él y le preguntó:
—Maestro bueno, ¿qué debo hacer para heredar vida eterna?
10,18: Jesús le respondió:
—¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno fuera de Dios. 10,19: Conoces los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no jurarás en falso, no defraudarás; honra a tu padre y a tu madre.
10,20: Él le contestó:
—Maestro, todo eso lo he cumplido desde la adolescencia.
10,21: Jesús lo miró con cariño y le dijo:
—Una cosa te falta: ve, vende cuanto tienes y dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en el cielo; después sígueme.
10,22: Ante estas palabras, se llenó de pena y se marchó triste; porque era muy rico.
10,23: Jesús mirando alrededor dijo a sus discípulos:
—Difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas.
10,24: Los discípulos se asombraron de lo que decía.
Pero Jesús insistió:
—¡Qué difícil es entrar en el reino de Dios! 10,25: Es más fácil para un camello pasar por el ojo de una aguja que para un rico entrar en el reino de Dios.
10,26: Ellos llenos de asombro y temor se decían:
—Entonces, ¿quién puede salvarse?
10,27: Jesús los quedó mirando y les dijo:
—Para los hombres es imposible, pero no para Dios; porque para Dios todo es posible.
10,28: Pedro entonces le dijo:
—Mira, nosotros hemos dejado todo y te hemos seguido.
10,29: Jesús le contestó:
—Todo el que deje casa o hermanos o hermanas o madre o padre o hijos o campos por mí y por la Buena Noticia 10,30: ha de recibir en esta vida cien veces más en casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y campos, en medio de las persecuciones, y en el mundo futuro la vida eterna.
10,31: Porque muchos primeros serán los últimos y muchos últimos serán los primeros.

(BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO)

LECTURA

¿Qué dice el texto?

Nos disponemos a leer el texto en su contexto para no hacer pretextos.

La Iglesia continúa presentándonos la lectura del Evangelio de San Marcos en el capítulo 10.

En las enseñanzas de Jesús, sobre cómo debemos vivir de acuerdo a la verdadera felicidad el evangelista nos propone, este texto con una enseñanza de Jesús muy importante.

La persona que se le acerca a Jesús, lo hace con sinceridad, quiere la vida eterna. Una pregunta muy importante para todos los seres humanos. Jesús, haciendo alusión al libro del Deuteronomio, responde con claridad, que uno solo es el bueno (Dt 6.4), pero como Él se identifica con ese “Bueno” que es Dios, le recuerda los mandamientos de la ley de Moisés. Esta persona le había preguntado por las acciones concretas, que son la parte de los mandamientos que se relacionan con los demás, por eso Jesús le recuerda solamente la segunda parte de los mandamientos.

Éste que se acerca es un hombre bueno, pues dice que ha cumplido todo esto desde su adolescencia. Por lo tanto, era un judío que practicaba la Ley. Vivía según lo que conocía de su religión. Pero Jesús le añade algo: “Te falta una cosa…” y esto que faltaba, es desprenderse de lo que lo ata en la tierra para luego poder seguir a Jesús. Lo importante es el seguimiento del maestro.

Y éste que se acercó con alegría para que el Maestro lo ayudara, se llenó de pena y se fue muy triste, porque no fue capaz de dejar todo para seguir a Jesús.

El seguimiento de Jesús, es lo que importa, ahora, la Ley debe ser perfeccionada con los que siguen al verdadero Maestro, a Jesús, el Cristo, el Señor. Y es difícil, porque muchas veces, como aclara Jesús, la gente tiene apegos a cosas materiales. Pero a aquellos como los discípulos que dejaron todo por Jesús y por anunciar la Buena Noticia, Jesús les promete algo más, les dice que tendrán 100 veces más de lo que dejaron y sus familias aumentarán también. Pero por sobre todas las cosas, el seguimiento de Jesús y el compromiso misionero de anunciar la Buena Noticia, aún en medio de persecuciones… tendrán la vida eterna.

Y culmina este texto con las palabras tan fuertes de Jesús, que muchos que se sienten los primeros, serán los últimos, y a los ojos del mundo, muchos de los que aparecen como últimos, serán los primeros.

· ¿Cómo comienza el texto?

· ¿Quién se acerca a Jesús?

· ¿Cuál es la pregunta que le hace?

· ¿Qué le responde Jesús?

· ¿Qué le dice esta persona sobre el cumplimiento de los

mandamientos?

· ¿Qué le añade Jesús?

· ¿Cómo se sintió esta persona cuando Jesús le dijo los nuevos

desafíos de dejar todo y seguirlo?

· ¿Qué más les dijo a los discípulos?

· ¿Qué pasará con los que aún en medio de persecuciones dejan

todo por Jesús y por la Buena Noticia?

MEDITACIÓN

¿Qué me dice el Señor a mí en el texto?

El texto sagrado no es sólo para leerlo, sino para dejarse leer por Dios que nos habla a cada uno a través del texto.

Amigo, debemos preguntarnos sinceramente cómo este texto está dirigido directamente a nosotros. Hoy vivimos un mundo donde hay muchas confusiones y los cristianos, que seguimos como discípulos del Señor tenemos que tener claridad ante estos temas.

En primer lugar, Jesús recuerda que la Ley de Moisés, sigue vigente. Y por eso recuerda los mandamientos. Hoy en día, mucha gente relativiza los Mandamientos y se olvida de cosas fundamentales.

Cuando dice “no matarás”, nosotros vivimos en una sociedad que hace de la muerte un negocio, y por eso se promueven los asesinatos a niños no nacidos, como el aborto, que es un crimen lamentablemente tolerado y hasta legislado en los países. Nosotros tenemos que tener claridad en el tema. También todo lo referente a la violencia que acaba con tantas personas, y a las guerras que como dijo el Papa Juan Pablo II siempre tienen una causa injusta. Los católicos debemos tener claridad de pensamiento y de obras con respecto a esto. Cuántas muertes también ocurren en las carreteras por culpa de personas que manejan embriagadas. Esto también debemos decirlo y sobre todo vivirlo.

Y todos los demás mandamientos que nos recuerda Jesús, es bueno que los mantengamos siempre presentes, para distinguirnos de otros que relativizan lo mandado por Dios y hacen de esto algo a su antojo.

Pero por sobre todas las cosas, Jesús nos invita a dejar de lado todo aquello que nos esclaviza y nos ata, para poder seguirlo a Él. Es muy posible que esta persona que fue a ver a Jesús, por más que tuvo un encuentro personal con Él, no lo entendió, o no pudo ver más que su propio yo. Saber ceder la posesión de las cosas, que están al servicio de la vida y del encuentro real con Jesús, el Cristo, es en el fondo lo que nos hará diferentes en el mundo. Si nosotros queremos tener “felicidad” y no queremos irnos tristes de un encuentro con Jesús, debemos realmente acercarnos con la mayor sinceridad, no para que Jesús justifique mis caprichos, sino para seguirlo de verdad y poner todos los medios en mi vida para seguirlo.

· ¿Quiero realmente encontrarme con Jesús?

· ¿Me interesa la vida eterna? ¿Soy capaz de preguntar con sinceridad?

¿Me siento asustado como los discípulos? ¿Entiendo que vivir en el

Reino no es fácil?

· ¿Podría hacer una lista de cosas que he dejado para seguir a

Jesús?

· ¿Verdaderamente tengo un compromiso, luego de encontrarme

con Jesús, de anunciarlo a los demás?

ORACIÓN

¿Qué le respondo al Señor que me habla en el texto?

Cuando me hablan no puedo quedarme mudo. Es mala educación. Debo responder. Para eso, la oración es la respuesta a Dios que me habló primero.

Proponernos un diálogo con Jesús que sea personal:

Te doy gracias Señor por tu Palabra y tu enseñanza. Me ofreces el camino a la verdadera felicidad.

Te pido que me ayudes para tener claridad para vivir los mandamientos.

Te pido que así como llamaste a este hombre a dejarlo todo por seguirte, también me llames a mí y me expliques cómo puedo hacer para poner todo lo que administro bajo el seguimiento a ti.

Quiero reconocerte como el Cristo, el Señor de la vida. Quiero que mi vida tenga sentido porque Tú estás conmigo y porque todo lo que hago es en función del anuncio de la Buena Noticia de la salvación para todos los humanos.

Gracias Señor por llamarme, Gracias por elegirme. Permite que sea un siervo tuyo bueno y fiel, que pone todo a disposición y deja lo que hay que dejar, por anunciarte a Tí.

CONTEMPLACIÓN

¿Cómo hago propio en mi vida las enseñanzas del texto?

Podemos recordar la frase de Jesús:

—Una cosa te falta: ve, vende cuanto tienes y dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en el cielo; después sígueme.

Mientras vamos pidiéndole al Señor entender también con nuestra voluntad lo que significa esto.

Acción

¿A qué me comprometo para demostrar el cambio?

Nuestra vida debe tomar un compromiso serio para llegar al proceso de conversión. Esto debe notarse exteriormente.

Individualmente analizarme en el cumplimiento de los mandamientos de la Ley de Dios y proponerse una enmienda. También hacer un diseño para un encuentro de seguimiento personal de Jesús, aunque haya que dejar muchas cosas y tiempo para actividades que no son del Señor.

Si estás en grupo, analicen las diversas formas que tienen hoy los mandamientos, y poder exponer a otros la implicancia. El grupo debe también preguntarse qué actividades o cosas exteriores debe dejar de lado, para ponerse a un encuentro serio con Jesús y el compromiso de anunciar el Evangelio

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Domingo 7 de Octubre de 2012 (Domingo 27to. Durante el Año Ciclo B) Download

TEXTO BIBLICO: Marcos 10, 2-16

10,2: Llegaron unos fariseos y, para ponerlo a prueba, le preguntaron:
—¿Puede un hombre separarse de su mujer?
10,3: Les contestó:
—¿Qué les mandó Moisés?
10,4: Respondieron:
—Moisés permitió escribir el acta de divorcio y separarse.
10,5: Jesús les dijo:
—Porque son duros de corazón escribió Moisés semejante precepto. 10,6: Pero al principio de la creación Dios los hizo hombre y mujer, 10,7: y por eso abandona un hombre a su padre y a su madre, [se une a su mujer] 10,8: y los dos se hacen una sola carne. De suerte que ya no son dos, sino una sola carne. 10,9: Así pues, lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre.
10,10: Una vez en la casa, los discípulos le preguntaron de nuevo acerca de aquello.
10,11: Él les dijo:
—El que se divorcia de su mujer y se casa con otra comete adulterio contra la primera. 10,12: Si ella se divorcia del marido y se casa con otro, comete adulterio.
10,13: Le traían niños para que los tocase, y los discípulos los reprendían.
10,14: Jesús, al verlo, se enojó y dijo:
—Dejen que los niños se acerquen a mí; no se lo impidan, porque el reino de Dios pertenece a los que son como ellos.
10,15: Se los aseguro, el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.
10,16: Y los acariciaba y bendecía imponiendo las manos sobre ellos.

(BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO)

LECTURA

¿Qué dice el texto?

Nos disponemos a leer el texto en su contexto para no hacer pretextos.

La Iglesia continúa presentándonos la lectura del Evangelio de San Marcos en el capítulo 10.

En las enseñanzas de Jesús, sobre cómo debemos vivir de acuerdo a la verdadera felicidad que Él nos propone, este texto es muy importante. Dos partes tiene esta lectura del Evangelio de Marcos, la primera es sobre el matrimonio y el divorcio y la segunda es sobre los niños.

En la enseñanza de Jesús sobre el matrimonio, vemos otra vez que los fariseos quieren poner a prueba a Jesús. Ellos lo hacen justo en el territorio donde Herodes vivía divorciado y había sido denunciado por Juan el Bautista, lo que le había costado la vida. Si Jesús dijera un no al divorcio, se haría algo impopular. Sobre todo, recordando que Moisés había permitido el divorcio en algunos casos. Y si dijera ampliamente que sí, no habría ninguna novedad en esta doctrina.

Jesús responde en dos momentos, uno en público, donde recuerda que Moisés permitió el divorcio por la dureza de corazón de los judíos (y obvio está acusándolos a ellos mismos). Pero Él se remite más al principio, citando el libro del Génesis y por lo tanto corrige al mismo Moisés, diciendo que “al principio no fue así”. Porque el varón y la mujer están llamados para complementarse en el amor. “los dos serán una sola carne”. El matrimonio, en la enseñanza de Jesús es indisoluble y es el camino para entender la gran familia que es el Reino de Dios.

Ya en privado, cuando los discípulos le vuelven a preguntar, la respuesta de Jesús es más directa, y clara: “—El que se divorcia de su mujer y se casa con otra comete adulterio contra la primera. Si ella se divorcia del marido y se casa con otro, comete adulterio.” Jesús aclara sin dudas su enseñanza sobre el matrimonio.

En la siguiente parte del texto, Jesús observa que los niños quieren acercarse a Él, pero los discípulos se lo impiden. En los niños, está la representación de los humildes, de los sencillos y al imponerles las manos, simboliza que el “reino de Dios es para los que se parecen a los niños”. Y vuelve a insistir, como lo escuchábamos en domingos anteriores que el que desee entrar al reino de Dios, debe ser sencillo, humilde, inocente como un niño.

· ¿Quiénes ponen a prueba a Jesús y cómo?
· Jesús, ¿Qué les contestó?
· ¿A quienes reprendían lso discipulos? Y ¿qué les dijo Jesús?
· ¿En cuantas partes se divide este texto y cuales son?
· ¿En donde, los fariseos lo ponen a prueba?
· ¿Qué significan los niños para Jesús?

MEDITACIÓN

¿Qué me dice el Señor a mí en el texto?

El texto sagrado no es sólo para leerlo, sino para dejarse leer por Dios que nos habla a cada uno a través del texto.

En el principio, en el libro del Génesis, dice sobre la humanidad: “a imagen de Dios los creó; varón y mujer los creó”. Pudo haber llegado Moisés y poder sugerir el divorcio, por la dureza del corazón del pueblo. Pero la enseñanza de Jesús es muy tajante: “10,7: y por eso abandona un hombre a su padre y a su madre, [se une a su mujer]10,8: y los dos se hacen una sola carne. De suerte que ya no son dos, sino una sola carne.10,9: Así pues, lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre”.
Quienes somos hoy los seres humanos para discutir o repensar lo que Jesús dice con tanta claridad. El misterio del amor humano entre un varón y una mujer, tiene una fuerza tal, que es para siempre y es indisoluble, es decir no se puede disolver.

Lamentablemente no podemos ignorar que hoy vivimos en una etapa histórica donde el matrimonio para muchos carece del valor absoluto. Muchas personas, influenciadas por ciertas corrientes culturales, no pueden “amar para siempre”. Hay generaciones enteras en que sus matrimonios “fracasan”, y no es el momento para analizar las causas. Pero sí es el momento para meditar en lo que el Señor mismo nos enseña sobre el tema.

· ¿Hasta qué punto yo he valorado el matrimonio? ¿Entiendo que el matrimonio es un sacramento y no un ritualismo social?
· Cuando se habla en mi entorno de matrimonio ¿En qué se piensa? ¿Qué se opina?
· Y en los diálogos con los grupos de mi entorno… ¿Cuáles son mis respuestas? ¿Doy siempre una respuesta desde la enseñanza de Jesús? ¿O soy “tolerante” con algunas situaciones?
· ¿Me preparo con seriedad para el matrimonio?
· ¿Vivo con fidelidad la propuesta que me hace Jesús a mí?

Y con respecto a los niños,

· ¿Valoro la importancia que tienen para el Reino de Dios?
· ¿Atiendo a los niños en su formación y educación religiosa?

ORACIÓN

¿Qué le respondo al Señor que me habla en el texto?

Cuando me hablan no puedo quedarme mudo. Es mala educación. Debo responder. Para eso, la oración es la respuesta a Dios que me habló primero.

Proponernos un diálogo con Jesús que sea personal:

Te doy gracias Señor por tu Palabra y tu enseñanza. En muchas oportunidades las voces culturales me llaman por caminos diferentes. Sin embargo Tú me hablas con claridad.

Te pido hoy por todos aquellos que has llamado a la vocación de servicio en el amor a través del sacramento del Matrimonio. Somos conscientes que no damos la suficiente importancia al matrimonio y que a veces lo tomamos a la ligera. Te pedimos perdón por todo esto.

Te pido para que llenes mi corazón de un amor puro como el tuyo, que no haya otros compromisos frente al amor más que la verdad y la sinceridad y que siempre que diga con mis palabras a alguien que amo, sea consecuente con lo que digo. Que no haya dobles sentimientos, ni ocultas intenciones.

Gracias por pedirme que tenga un corazón como el de un niño. Dame la valentía para ser sencillo y humilde y poder así ir ganando mi lugar en el Reino de Dios, como Tú lo indicas. AMÉN

CONTEMPLACIÓN

¿Cómo hago propio en mi vida las enseñanzas del texto?

Podemos recordar la frase de Jesús:

Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre

Mientras vamos pidiéndole al Señor entender también con nuestra voluntad lo que significa esto.

Acción

¿A qué me comprometo para demostrar el cambio?

Nuestra vida debe tomar un compromiso serio para llegar al proceso de conversión. Esto debe notarse exteriormente.

Individualmente proponerse estimular a las personas cercanas que tienen vocación matrimonial para que sigan perseverando. También ayudar a matrimonios que estén pasando por algún problema para encontrar solución cristiana.

Si estás en grupo, hacer con todos los jóvenes de tu grupo una actividad para estimular la catequesis presacramental del matrimonio. Recordar a través de algún cartel sobre el amor y la indisolubilidad del matrimonio

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